El director del Brou, Juan José Cladera, explicó que la falta de efectivo en los cajeros fue provocada por «un aumento desmedido de la demanda que no teníamos previsto».
El jerarca explicó que se han reforzado las jornadas de trabajo de quienes atienden este servicio, situación que se mantendrá hasta que la demanda retorne a su niveles habituales.
El jerarca sotuvo que ya se han tomado las medidas para solucionarlo. «Desde que asumimos con el actual directorio una de las principales preocupaciones fue siempre disponer los medios para facilitar las transacciones a nuestros clientes; llegamos con un servicio de 115 cajeros automáticos de la institución en 2005, y actualmente tenemos más de 300, si contamos los servicios que tenemos a través de Abitab», dijo.
Añadió que «un fenómeno que se acentuó este año sin que lo viéramos venir, fue que la mejora del poder de compra de la gente les hizo cambiar la estrategia, se van de vacaciones sin llevar más que el dinero necesario para movilizarse, y van sacando de los cajeros a medida que lo necesitan, pero tenemos un límite físico y es que no podemos superar la capacidad de dinero que puede contener cada cajero».
«Tenemos el problema perfectamente identificado, y ya aplicamos las medidas para solucionarlo, las que incluyen refuerzos de las jornadas de trabajo de quienes atienden ese servicio, y suspensión de todas las licencias hasta que la demanda afloje», indicó Cladera.
Por su parte el dirigente sindical del Brou, Gonzalo Pérez, aseguró que no es cierta una versión de que el problema se debió a que los funcionarios del banco no estaban haciendo horas extras. «Hubo algo de eso antes de fin de año, pero sólo para quienes atienden el transporte de caudales del banco, pero quedó solucionado; estuvimos analizando con las autoridades del banco por qué aparecieron estas versiones, y no descartamos que sea una forma de estar preparando el terreno para pedir más horas extras», afirmó.
